Cuando las palabras, agotadas, ya no suspiran ni en silencio.
Cuando se deshidratan los ojos de mirar y no entender nada...
Cuando el pulgar hace amagos de pulsar "enviar"...
Cuando ya no quedan frases ni verbos que conjugar...
Cuando te quitas el pelaje, y desnuda ya no tienes nada más para enseñar...
Cuando la cera tapona tus oídos para ni oír lo que no quieres escuchar...
Cuando sólo hay imágenes en tu cabeza que sólo tú puedes rescatar,
cuando el humo que inhalas te transporta al lugar donde no puedes volver...
Cuando estás tan cansada de saber quién eres...
Cuando todo esto vuelva a suceder: cierra los ojos, respira y tan sólo levántate.
Porque puedes girar y girar, puedes ir y venir...Porque son eso: recuerdos para no morir.
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